Capitulo 15 : Entiendeme

A la mañana siguiente se despertó como una rosa.

Corrió a la cocina.

• ¡Buenos días! – gritó Nikki.

Siguió corriendo y fue a su habitación. Natsume seguía durmiendo.

Como estaba tan “happy” lo despertó de una manera muy curiosa

• Um, ¿que haces? – le dijo él entre suspiros.

Él tenía el corazón acelerado.

• Darte las gracias por lo de ayer.
• No hace falta – dijo él con la respiración entrecortada.

Ella parecía divertida.

• ¿Te vienes a bañar conmigo? – pregunto pícaramente.

Él no supo que decir y Nikki impaciente lo agarro y lo arrastró en contra de su voluntad.

“Plash” – sonó el agua cuando Nikki tiró a Natsume.

Tras hacerlo volvió al vestuario y se desvistió.

Cuando volvió él estaba todo rojo y tapándose.

Nikki le lanzo una toalla para que se tapase.

Nikki rió un poco. Se metió en el agua lentamente con una toalla cubriéndole el cuerpo.

Tras meterse se la sacó. Natsume seguía con la toalla puesta.

Nikki se le acercó y se la saco poco a poco mientras lo “mimaba un poquito” aunque antes lo tentó hasta que se puso duro.

• ¡Nikki! … ¡Para! – grito él.

Ella paró y Natsume se asombro.

Nikki estaba ofendida. Siempre la rechazaba.

Se separo de él y se relajó. No lo volvió a tocar.

Él se acerco a ella lentamente.

• ¿Estas enfadada?
• No.
• ¿Estas segura?
• Si.

Él no quedó contento con sus respuestas.

• Dime la verdad.
• Esa es la verdad.
• ¡Nikki! – grito él perdiendo la paciencia.
• ¿Que? No estoy enfadada. Estoy ofendida. Menos esa vez en tu casa, el resto de las veces lo hago casi a la fuerza. Nunca me dejas.

Él se puso rojo.

• Yo… No te lo impido… Solo... yo... – decía duvitativamente – Me da vergüenza – le espetó él.

Se dio la vuelta y se cubrió la cara.

Ella se acercó por detrás. Lo abrazó y bajó un poco la mano para hacerlo sentir mejor.

• Um... Para por favor.
• No. No pienso parar. Si te da vergüenza solo no hagas nada y dejame hacer.

Él se quedo quieto y no hizo nada. Intentó contener su voz pero no lo consiguió.

Se empalmó con rapidez y no tardó en eyacular.

Respiraba costosamente

• Creo que no estuvo mal, ¿no?

Él se quedo sin palabras.

• Si me respondes te haré sentir bien todo lo que quieras – le susurro ella al oído.

Él se acaloró. El silencio no cesó.

• Haré todo lo que quieras y no solo con la mano – dijo provocativa rozándole la oreja con la lengua.

Él se ruborizo mucho mas. No pudo decir nada. Esta boquiabierto y otra vez empalmado.

• Por favor, amor. Contestame – dijo ella con voz sensual.

Él cerro los ojos y lo soltó todo.

• Muy... muy bien. No tengo palabras para decir... para decir lo excitado que esta y que estoy – dijo entrecortadamente.

Ella sonrió complacida.

• Solo una cosa mas, ¿que quieres que haga?
• Yo... lo que quieras – dijo volviendo a cerrar los ojos.

Ella se puso delante suya y con su boca lo hizo sentir bien.

Volvió a intentar no emitir sonido alguno pero no pudo y tubo que taparse la boca. Ella lo miraba y se excitaba viéndolo tan caliente.

• No tapes tu boca. Dejame oírte. Me vuelve loca oírte gemir – dijo ella antes de darse cuenta.

Él del asombro destapó su boca.

• Um... ah... agh... agh – gemía el sin poder controlarlo.

Rápidamente se la volvió a tapar.

• Solo hay una cosa que no puedo darte. Si la quieres cogela – dijo dándole a entender lo que quería decir.

Él se ruborizó.

Estaba atónito. No sabia que decir o mas bien no era capaz de decir nada.

• Oh que lindo. Te quedaste sin palabras. Que rico pero no puedes ser tímido toda la vida. A mi también me gusta disfrutar
• Yo... lo siento mucho – dijo avergonzado de su comportamiento.

Ella sonrió y animadamente lo besó en la frente.

• No te fuerces. Yo me ofrezco a enseñarte pero como te quejes me niego – dijo entre risas.
• Si. Gracias – contestó tímidamente.

Nikki lo miraba extrañada. Había algo que no entendía.

• ¿Por que eres tan tímido ahora? ¿Que ocurrió con lo salido que eras antes?
• Nada. Solo que eres tan atrevida que me acomplejas y me vuelves tímido – dijo mirándola de reojo.
• Ja ja. En serio eres todo un amor.

Ella decidió empezar con su lección.

Se sentó encima de él y le besó en cuello.

Coloco su mano sobre su pecho.

“Bum-bum. Mi corazón no para de latir. Nikki se enfadara si ve que sigo nervioso” – pensó Natsume.

Él se sonrojo nuevamente.

Ella parecía que podía leer su mente porque intentó que se calmase un poco.

• Ves. No es tan difícil tocarme.

Él noto que el corazón de ella también estaba desbocado.

• No muerdo – dijo esbozando una sonrisa tímida.
  Cogió su mano y la bajo poco poco hasta llegar a sus caderas.
  Él la detuvo antes de que pensase en bajar mas.
  Ella vio que se estaba pasando un poco para ser la primera vez.
  Esta vez volvió acoger su mano con ternura y le susurro al oído :
• Creo que por hoy basta. No haremos mas.
  Ella intento levantarse pero él la agarro.
• No te vayas. Quedate un poco – dijo costosamente.
• Lo siento. Aquí hace mucho calor. Me voy a vestir un poco y voy a la cocina a hacer la comida para ti y para Fernando.
  Él estaba en la cama. Rabia ido cuando los vio tan acaramelados.
  Él se enfado un poco.
• ¿Como es su personalidad? ¿Es atrevido o tímido?
• Atrevido. Bastante atrevido.

Él se enfurruño aun mas.

• Seguro que lo prefieres a él.
• No – dijo ella tajante.

Él la miraba dudoso.

• Me gusta la gente dulce. Es divertido. Me gusta tu reacción a la tentación – continuo ella.
• ¿Solo por eso estas conmigo?

Ella suspiro incrédula.

• Estoy contigo por todo lo bueno que tienes. Eres dulce y agradable y también muy listo y si encima me dejáis estar con ambos pues mejor.

Él no parecía creérselo.

• A mi no es que me parezca bien solo es que dentro de poco tengo que volver a casa. Por ahora no me parece mal. Pronto me tengo que ir. No puedo pasar mas tiempo fuera de casa y lo sabes.

Ella lo miraba triste. Quería estar con él y le costaba.

• Y, ¿Como hago para verte?
• Yo puedo ir a tu mundo.
• Sabes perfectamente que eso no puede ser. Estoy expulsada. Apenas puedo ver a mi madre o a mi hermana. Sabes también que todos volverán pronto y pretendo que podamos vivir juntos por ahora. Es un mundo seguro y podremos perfeccionar nuestros elementos.
  Sin tu permiso, el mio y el de nuestros padres no podremos y si no me ayudas no lo conseguiré.
  ¿Que contestas?
• No lo se.

Nikki continuo hablando. Quedaba mucho que decir antes de convencerlo.

• Sabes que todos somos príncipes y si no nos aliamos no lo conseguiremos nunca. Noelia y Roberto; Enrique y Andrómeda; Empireia y Esban; tu y yo...

Parecía ya mas convencido pero aun tenia dudas.

• ¿Todos viviremos aquí?
• Si. Haré un piso mas.
  En el primero estaría la cocina, el baño con terma, el salón y nuestro dormitorio y en el segundo sus habitaciones y otro baño.
  Fuera iría la piscina.
  En el tejado podríamos tomar el sol.
• Y, ¿donde entrenaríamos?
• Eso depende.
  Tanto los nekkos como vampiros entrenarían juntos dependiendo de su elemento.
  Los de agua, en la terma o en la piscina dependiendo del nivel.
  Los de fuego, lo harán en la azotea que es donde mas da el sol.
  Los de tierra, lo harán en un subterráneo que haré con galerías.
  Los de naturaleza, en el bosque ya que controlan el aire y todo lo natural.
• ¿Como se impartirán las clases?
• No lo pensé pero supongo que depende de la subrama de cada pilar.
  Yo enseñare el agua. Unos días a un nivel otros días a otro ya que no hay mas que conozca ese elemento.
  El fuego lo enseñara mi tío. Tiene un nivel bastante alto. Él solo puede enseñar “el calor de la vida” en los niveles altos.
  Para la tierra no se de nadie. Creo que Fernando es de tierra pero no lo se seguro.
  La naturaleza la dará Empireia. Lo suyo es lo sagrado y lo antiguo combinado con el ambiente

Él parecía que todavía dudaba un poco.

• Um. No se yo. Ya lo discutiremos todo juntos esta noche en la cena.
• Oh. voy a despertar a Fernando. Aun tenemos que hablar de su castigo.

Natsume la agarro del brazo.

• ¿Que te gusta de él?
• Que es muy dulce cuando quiere – dijo rápidamente para poder irse.

Nikki se soltó y se dirigió a su habitación.

Se fue directa cara su cama y lo intento despertar pero antes de darse cuenta él la había tirado sobre la cama.

• ¿Que te gusta de él? – dijo sin rodeos.
  Últimamente lo “mimas” mucho, ¿no crees?
• Me gusta que es dulce. Lo mismo me pregunto el de ti.
• Y, ¿Que le dijiste?
• Lo mismo aunque últimamente no lo demostráis.
  Solo os comportáis celosos y os odiáis y no pensáis nada en mi.

Ella llamo a Natsume y ellos nada mas verse si miraron con odio.

Nikki se enfado y se fue.? Cogió dos vasos de agua y se los echo por encima.

• De esta manera no hay quien conviva. No os podéis ni aguantar. No pido que os queráis solo que no me deis problemas.
  ¡Ya me harte!

Nikki salio al jardín y se fue.

Al poco volvió pero solo para decir algo y volverse a ir.

• Cuando estéis dispuestos a cooperar hablamos. Hasta entonces estaréis juntos aquí y al listillo que se le ocurra irse que se vaya para siempre. Que no vuelva.

Ellos la miraban mientras se iba dignamente.